Desde la creación de la radio, la novela ha sido un formato muy popular y buscado por la población mexicana. Con la llegada de la televisión se fue perfeccionando este formato para contarnos historias que nos hicieran olvidar los problemas de la vida cotidiana.
México es un país telenovelero, tanto en su producción como en su consumo. En 1958 se estrenó la primer telenovela producida por Jesús Gómez con el nombre de «Senda Prohibida», transmitida a través de Telesistema Mexicano, ahora conocido como Televisa.

La televisora mexicana encontró un producto que era consumido y solicitado por la audiencia, a lo largo de los años creó muchas historias nuevas en donde se repetía una particular formula: La muchacha pobre que sufre toda su vida hasta que se casa con rico o descubre ser hija de alguien acaudalado, y de la noche a la mañana vence todos sus problemas cambiando su vida y estatus económico.
Rosa Salvaje, Maria Mercedes, Marimar, Teresa, Simplemente María, María la del Barrio, etc. La mayoría de ellas tienen un común denominador: están llenas de estereotipos y cuentan una historia de superación la pobreza.
El consumo de este producto ha provocado que la sociedad mexicana se comporte y piense de cierta manera. El mexicano promedio tiene el sueño de ganarse la lotería, comprar una casa lujosa y dejar atrás la pobreza, por eso mes con mes compra un boleto, cruzando los dedos para tener suerte y ser el afortunado ganador.
¿Aún no te suena esta historia? Esta narrativa ya fue producida en el año de 1995 bajo el nombre de El Premio Mayor, un melodrama que cuenta la historia de Guicho Dominguez, un obrero de clase baja mexicana inculto, machista y mujeriego que gana el premio más grande y cambia su vida radicalmente.
Las historias no han cambiado, simplemente se han adaptado al cambio de la sociedad y los tiempos modernos, un proceso que ha funcionado con los años por una simple y sencilla razón: la pobreza.
En México aproximadamente el 50% de la población se encuentra en situación de pobreza y día a día busca la forma de salir adelante mejorando su economía. Si a esta parte de la población le muestras un relato de una persona similar a ellos que logra superar las adversidades, le estarás mostrando un espejismo de lo que sueñan, por eso no se pueden perder que pasara con su protagonista favorito, en el fondo están deseando que ellos también les pase.
Fuente:
https://www.eluniversal.com.mx/espectaculos/los-pobres-reinan-en-el-cielo-de-las-telenovelas