La situación en el mundo cada vez está más complicada, todo sube de precio, desde la gasolina, el aguacate y las propiedades, hasta… ¡LA CARNE!

Desde junio de 2017, los productos alimentarios como el trigo y la carne, aumentaron de precio a nivel mundial. En un año, el costo de alimentos tan básicos como la carne, aumentó en un 7%, según datos de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura).

De hecho, para muchos mexicanos comer carne a diario, es considerado un lujo; aunque tenemos que aceptar que, a comparación de otros países (como Francia y Estados Unidos), aún no estamos tan mal.

Los precios de la carne en México, pueden no estar tan elevados como en otras naciones, pero el gran problema es que los mexicanos ganamos apenas una cuarta parte del salario mínimo que se gana en Estados Unidos y en algunos países europeos; por esta razón, a pesar de que la carne es más económica, aún así, a la prole no le alcanza para comprarla.

Tomando en cuenta datos de varios países, estudios revelaron que el pollo es la carne más económica para los mexicanos, ya que cada kilo cuesta aproximadamente 4.33 dólares; como resultado de esto, el pollo es uno de los alimentos que más se consumen en este país, ya que los mexicanos consumen alrededor de 63.80 kilogramos de este alimento al año.

Después del pollo, la carne de puerco es la más económica (5.55 dólares por kilo); después le sigue la carne de res (6.69 dólares por kilo) y finalmente, tenemos a la carne de pescado, la cual es más costosa para los mexicanos (7.51 dólares por kilo).

Otro datos escandaloso es el siguiente: según el diario El Financiero, un trabajador mexicano necesita trabajar hasta 18 horas diarias para comprar un kilo de bisteces, mientras que un trabajador danés, solamente tendría que laborar 1 hora para adquirir la misma cantidad de carne de res.

Para comprar un kilo de pechuga de pollo, un mexicano tienen que trabajar aproximadamente 7 horas y media, mientras que un empleado en Suecia, nada más requiere 50 minutos de trabajo para comprar la misma cantidad de pollo.

Cuando hablamos de pescado, las cosas se ponen aún más complicadas. Resulta que para comprar un kilo de pescado, nosotros los mexicanos tenemos que trabajar más de 32 horas; por otro lado, en Suecia solamente tienen que trabajar poco más de una hora, para prepararse unos buenos filetes de pescado.

Es obvio que en México es un lujo comer carne, y es peor el hecho de que los costos de la carne no han bajado en mucho tiempo, sino que cada año van en aumento.

¿Alguien ha considerado la opción de volverse vegetariano?

@TotalmenteProle