Una de las cosas que causa más conflictos en México, es el estado y la eficacia con la que opera el transporte público, y cuando hablamos del transporte en la Ciudad de México, hablamos de un problema que parece no tener soluciones inmediatas.
La limitada inversión al transporte público, en la capital mexicana, ha derivado en un colapso digno de cualquier filme apocalíptico; la insuficiencia, inseguridad e incomodidad de nuestros medios de transporte público, solamente han logrado que muchos más mexicanos opten por comprar vehículos propios, lo cual ha colapsado las avenidas de la CDMX, y provocado múltiples contingencias ambientales.
En resumen, el pobre transporte público de la ciudad, es el inicio de un ciclo sin fin, el cual comienza con la prole harta de utilizar esta opción, para continuar con la adquisición de autos propios, los cuales provocan tráfico y aumento en los niveles de contaminación, para terminar con la pobre respuesta del gobierno, que se limita a decretar contingencias que nos obligan a recurrir al uso de transporte público, que sigue sin mantenimiento y que nada más nos estresa más y más.
El transporte público de la Ciudad de México, moviliza a más de 5.5 millones de usuarios cada día, entre las doce líneas del Metro, si a esto le sumamos todos aquellos que usan otros medios como el Metrobús, los autobuses, camiones, tren suburbano, trolebús, tren ligero, o las famosas Ecobicis, podemos ver que gran parte de la prole depende de la calidad con la que cuenten estos vehículos, para realizar sus actividades diarias.
A pesar de que los costos del transporte público en la Ciudad de México son de los más bajos de toda América, y del mundo, es normal que los usuarios sientan molestia cuando se elevan las tarifas, esto debido a que las mejoras que promete el gobierno nunca son visibles; las estaciones del Metro se siguen inundando, los conductores de los camiones siguen manejando como bestias y los asientos del Metrobús cada vez están más maltratados.
¿Cómo podemos sentirnos seguros al momento de usar estos medios de transporte, si cuando te subes a un microbús o combi sabes que corres el riesgo de ser asaltado, sin que nadie haga algo? ¿Acaso es difícil entender que las estaciones del Metro no dan para meter más gente a las 7 de la mañana?
La Ciudad de México está a punto de colapsar, por que de plano ya no hay ni para dónde hacerse, si uno anda en carro es víctima del terrible tráfico, que aumenta cada día, mientras que si usamos el transporte público, inevitablemente sufriremos aplastados, mojados, asaltados o hasta manoseados.
Si el gobierno realmente quiere reivindicarse, es necesario que se ponga las pilas e invierta realmente en infraestructura, para que el transporte público sea más accesible, moderno, seguro, y cuente con la capacidad para transportar a todos los mexicanos que lo necesitan; si esto se lograra, es un hecho que el tráfico y los efectos de éste, se verían disminuidos significativamente.
Pero bueno, aunque se vea complicado, se vale soñar…