En México poco más de la mitad de la población enfrenta un panorama donde, en muchas ocasiones, los dados están cargados en su contra desde el nacimiento. Las desigualdades sociales comienzan desde temprana edad, limitando el desarrollo de las capacidades, especialmente para las mujeres más pobres.
Las mujeres pobres están más expuestas a violencia de género y los delitos sexuales, y son innumerables los casos en donde la violencia saca provecho de esa condición.
TheConversation y la clínica-científica de la Universidad de Queen’s, Susan Bartels, denunciaron la participación de la Misión de Estabilización de la ONU en Haití (MINUSTAH) en abuso y explotación sexual a mujeres y niñas, con dos relatos que corresponden a niñas de 11 años.
La publicación también revela que “a los menores se les ofreció comida y pequeñas cantidades de dinero en efectivo para tener relaciones sexuales con el personal de la ONU, y que la MINUSTAH estaba vinculada a un círculo sexual que operaba en Haití con aparente impunidad”. Y lo mismo pasa con los feminicidios.
A las pobres las matan más.
No todas las mujeres están en peligro, debido a que el estatus social, político y de poder es distinto y estos aspectos influyen en la violencia que viven las mujeres. Las estadísticas lo prueban, en su mayoría las víctimas de violencia intrafamiliar o de feminicidio son mujeres que viven en pobreza.
Esto lo advirtió Julia Monárrez Fregoso, doctora en Ciencias Sociales con especialidad en Estudios de la Mujer y Relaciones de Género, al participar en el Foro Políticas Públicas contra el Feminicidio. Frente a una audiencia, en su mayoría femenina, la especialista en derechos de la mujer aseguró que la violencia contra el género no sólo es parte de la cultura machista patriarcal, sino que también influye en la desigualdad del capitalismo neoliberal, el racismo, la migración, la creación y mantenimiento de sistemas de dominación que paralelamente funcionan con redes criminales.
“Estos sistemas de dominación, desposesión y muerte implican que si la vida no es digna de vivirse tampoco sus muertes son dignas de llorarse. Esta relación también implica en nuestro país las redes de criminales de las mafias que son sistemas paralelos de poder que dominan muchos territorios. Lo que se está matando en nuestro México son en mayor cantidad mujeres y hombres en pobreza, y entonces no podemos decir que todas tenemos el mismo peligro porque hay quienes gozamos de mayores privilegios y poderes”.
Los estados más pobres son los que registran un mayor número feminicidios.
El estado que lidera los feminicidios en el país es Veracruz. Ahí se registraron 152 muertes durante el año 2019. Es decir, en la entidad se comete uno cada dos días y la mayoría en mujeres mayores de 18 años de edad.
El Estado de México ha sido considerado, históricamente, como la entidad más peligrosa para las mujeres del país. En todo el 2019 se cometieron 122, colocando al estado como el segundo más violento para las mujeres.
Según la organización Alto al Secuestro, de 2018 a 2019 el secuestro de mujeres aumentó un 24.2%, los estados con mayor número de secuestros fueron Veracruz con 147 y el Estado de México con 103.
De la lista de los 32 estados, estos 2 contienen una gran cantidad de personas en situación de pobreza. El Estado De México con 8.26 millones y Veracruz 4.6 millones, obteniendo el primero y segundo lugar en pobreza, con lo cual podemos establecer una estrecha interrelación entre el nivel económico (e incluso educativo) con los feminicidios.
Fuente: https://www.infobae.com/america/mexico/2020/02/23/feminicidios-en-mexico-los-cinco-estados-con-mas-ataques-contra-mujeres-en-enero-de-2020/https://www.periodicocentral.mx/2020/pagina-negra/feminicidios/item/42-2019-el-mas-violento-para-las-mujeres-ocurrieron-890-feminicidios
https://www.forbes.com.mx/los-10-estados-con-mas-pobres-en-mexico/