La Cuarta Transformación es el movimiento a futuro, visión del presidente Andrés Manuel López Obrador, sobre su gobierno y hacia dónde se quiere encaminar al país, buscando un cambio profundo en él. Sin embargo, a un tiempo de su inicio, las preguntas se aglutinan y las respuestas escasean.
El eje sobre el que se mueve la 4T es el combate a la corrupción en todas las instituciones de gobierno y el país en general, acabar con la pobreza y reducir la desigualdad económica. Para llegar a dichos objetivos, la estrategia de gobierno es subsanar a la población más vulnerable con contribuciones y transferencias de efectivo directamente a ese sector.
El problema es que recibir dinero sin hacer absolutamente nada, resulta irritante para otros sectores, debido a un tabú creado en las últimos años de que el pobre si recibe dinero se hará flojo o que lo gastará en cosas que no son de provecho.
A partir de aquí se deja entrever un problema más grande: los prejuicios alrededor de la pobreza, reforzados por la precariedad.
¿Cómo se traduce esto? Simple, los pobres seguirán siendo pobres porque han sido limitados a labores manuales que no les permiten desarrollarse, todo por un mal diseño de políticas laborales y de estructura de fondo.
Si bien las intenciones del gobierno son buenas, no es suficiente con desear que las cosas salgan bien y repartir dinero. Para tener éxito se requerirá una reestructuración agresiva de programas y políticas públicas que impacten a su vez en otros frentes.
Ahora bien, a todos los sectores vulnerables a los que se les están dando apoyos, independientemente de su situación, debe buscarse la forma de fortalecerlos, cambiando la visión que se tiene de ellos de comodinos, irracionales e incapaces.
Fuente.- https://redaccion.nexos.com.mx/?p=10016
https://www.forbes.com.mx/cuarta-transformacion-acabara-con-monstruosa-desigualdad-amlo/