Tener un auto se pensaba que era sinónimo de tener dinero y estabilidad económica. El día de hoy muchas personas lo tienen para desplazarse con mayor comodidad a sus trabajos, escuelas o empleos. Lo cierto es que un coche es una inversión que puede estar afectando a tu bolsillo más de lo que crees.

Al invertir en un automóvil, buscamos ahorrar algunos pesos pero hay algunos gastos que puedes estar cometiendo y que, más allá de ser una inversión, se ha convertido en gasto innecesario. Si estabas pensando comprar un coche, te sugerimos pensarlo dos veces antes de hacer y considerar estos “gastos hormiga” que son necesarios para que puedas manejar con tranquilidad:
● Licencia de conducir: sin ella es imposible que puedas circular por las calles y autopistas del país. Es el documento necesario para todo automovilista pero recuerda que tiene un costo y no es nada barato ya que varía de acuerdo al Estado donde se expida.
● Tenencia: el impuesto que debes pagar todos los años para tener derecho a circular. El precio de este varía de acuerdo al modelo, factura y marca de auto que tengas.
● Tarjeta de circulación: este trámite se debe hacer para seguir teniendo derecho a circular por los próximos tres años, el precio también varía si se trata de reposición o nueva emisión.
● Seguro: es importante contar con protección ante cualquier eventualidad por lo que tendrás que emitir un seguro contra choques, desastres naturales o factores que sólo las empresas de seguros pueden cubrir.
● Verificación: esta medida sirva para revisar que tu auto cumple con las medidas ambientales necesarias para poder usarse, en caso de no ser así tendrás que acudir a que le hagan reparaciones y ahí va otro dinero gastado.
● Mantenimiento y combustible: revisión de motor, aceite, frenos y la gasolina son de los gastos más recurrentes que tendrás. Estos deben ser constantes si quieres mantener a tu coche en buenas condiciones, sólo recuerda que el precio de la gasolina no siempre es estable.

Fuente: