Empecemos este tema con la pregunta: ¿sabes qué es la periferia? No se trata de un espacio físico, es algo que va más allá. Y es que este término es usado para resaltar la precarización, ya que hablamos de un lugar abandonado por el Estado.

Este concepto no solo se refiere a una ubicación geográfica, también hace referencia a lo político y lo social. Dichos espacios son orillados a ocupar lugares designados a personas de una misma clase social, es decir, en las periferias se engloban comunidades excluidas de los lugares céntricos que suelen ser habitados por personas del sector privilegiado.

Se trata de los lugares más alejados, en donde aquellos que trabajan tienen que tomar el transporte público y recorrer un camino que toma de 2 a 3 horas para llegar a su destino, quitando no solo tiempo de descanso, sino también dinero ya que muchas veces trasladarse no resulta nada barato.

En resumidas cuentas y para que quede más claro: una periferia huele a comida callejera, siempre vas a encontrar transporte público haciendo carreras para ganar pasaje, calles llenas de basura, ambulantaje tratando de vender sus productos, altavoces de quienes recolectan fierros viejos y tristemente, perritos callejeros.

Y visualmente te podemos decir que la periferia luce llena de graffitis, casas en obra negra a las orillas o sobre un cerro, calles llenas de baches que se sienten inseguras y abandonadas.

Porque tristemente la periferia está llena de precariedad y vulnerabilidad que no luce, ni huele, ni se siente agradable.

Sin embargo, esto no es culpa de quienes viven en ella, sino de las autoridades que centralizan los recursos, las oportunidades e incluso los eventos. ¿Te has preguntado por qué todas las marchas y actos culturales suceden en el centro y no en las orillas? He aquí una respuesta: la capital se mantiene del trabajo periférico, pero pocos quieren ir, incluso de visita, hacia las zonas periféricas.

A pesar de todo esto y de que estemos hartos de las injustas oportunidades, por ahí dicen que la periferia existe porque resiste y desde su enunciación podemos iniciar un cambio.

Fuente:

La resistencia está en la periferia